Un año más, en Viveiro, la lluvia se hace compañera inseparable de su Semana Mayor. El trabajo de todo un año de preparativos se ve deslucido por el azar de la metereología. Dura es la decisión de cancelar eso que has estado preparando, con toda la ilusión del mundo, durante un año; mas dura, si cabe, al ver las caras de los cofrades cuando les comunicas que la procesión es cancelada. Pero la conciencia está tranquila, al saber que la decisión tomada es la correcta, puesto que el respeto a la conservación del patrimonio y a nuestras Sagradas Titulares, a las que tanta devoción le manifestamos cada día en la Capilla de la Misericordia, debe de estar por encima de nuestras enormes ganas de salir a rendirles culto público por las calles de Viveiro. Gracias a tods los que de una u otra manera habeis contribuido a que esta procesión hubiera tenido lugar: a los llevadores, los nazarenos, el cuerpo de acólitos, el clero, la Guardia Civil que escoltaba al Santísimo Eccehomo, al Cuerpo de Bomberos de Viveiro que escoltaba a Ntra. Sra. de la Clemencia, a la Banda "Nuestra Señora de la Misericordia" y a la Banda Naval que son la quinta vara de nuestros tronos, a la banda de tambores que abria la procesión, a las autoridades civiles que siguen apoyando nuestra Semana Santa, a los representantes de la Marina Española que iban acompañarnos en nuestra salida, y a todos y cada uno de nuestros cofrades, desde los que más horas le dedican a la Cofradía, como a los que nos acompañan desde cualquier otro lugar... la Cofadía de la Misericordia sigue siendo la casa de todos. Esperemos un año.
Feliz Pascua de resurrección!!!!!!!!!!!!!
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